30 DE AGOSTO.

Día del Ferrocarril. El 30 de agosto de 1857 se inauguró la primera línea de ferrocarril del nuestro país. Iba desde la actual Plaza Lavalle de Buenos Aires hasta la estación La Floresta.
1946: Acontece la fundación del Club deportivo “Santa Rosa” en la zona del Palmar, jurisdicción de Resistencia, equipo de fútbol constituido exclusivamente por aborígenes, en su mayoría Qom, quienes realizaron con éxito distintas competencias contra equipos de la zona. Fuente: Oliva, Jorge. "Nuevas Efemérides Aborígenes del Chaco",3ra Edición, 2014 (Edición corregida y aumentada). --RSG
1963: Se reúne en el local de la Legislatura el Colegio Electoral que debía designar las autoridades ejecutivas de la Provincia, según los resultados de las elecciones del 7 de Julio. Presidió las deliberaciones el doctor Adolfo Sosa. Resultaron electos, para gobernador, el escribano Deolindo Felipe Bittel, y para vice el señor Nilson Franchisena.-- Fuente: Tissera, Ramón. “Calendario Histórico Chaqueño”, Ed. Cultural Nordeste, 1977, Rcia. —RSG
1973: La Legislatura sanciona la ley de creación de Obras Públicas, Empresa del Estado Provincial (OPEEP), que con financiación provincial asumió la ejecución de obras de estructura urbana. Fue la empresa estatal más efectiva en sus realizaciones.-- Fuente: Tissera, Ramón. “Calendario Histórico Chaqueño”, Ed. Cultural Nordeste, 1977, Rcia. —RSG.
1980. Quema de libros. Los libros a la Hoguera. El destino final de muchos libros prohibidos era, entonces, arder en un pozo, en una hoguera común. Aunque hubo muchos otros casos, la quema de libros más grande de la dictadura argentina, o sea, la paradigmática, fue la que sufrió el Centro Editor de América Latina, que había fundado Boris Spivacow. El 30 de agosto de 1980 la policía bonaerense quemó en un baldío de Sarandí un millón y medio de ejemplares del sello, retirados de los depósitos por orden del juez federal de La Plata, Héctor Gustavo de la Serna.
"Los libros del depósito de Sarandí ardieron durante tres días, algunos habían estado apilados y se habían humedecido, así que no prendían bien. La colección en la que yo colaboraba, Nueva Enciclopedia del Mundo Joven, fue quemada íntegra. Me acuerdo de que en uno de los fascículos, de historia del feudalismo, había un príncipe que no se terminaba de quemar. El pobrecito era un príncipe medio afeminado y lleno de flores que se resistía a la hoguera", cuenta la escritora Graciela Cabal, que en esa época era la secretaria de redacción de esa enciclopedia.
Ardieron así, en esa como en otras quemas, infinidad de libros de diversos autores de todo tipo, como Trotsky, Ernesto "Che" Guevara, Marx, Fidel Castro, Perón, Mao Tsé Tung, Enrique Medina, Blas Matamorro, Griselda Gambaro, entre muchos otros.
Fuente: Fernando Ruffa