20 DE OCTUBRE. DÍA MUNDIAL DE LA OSTEOPOROSIS‏

El 20 de octubre es el Día Mundial de la Osteoporosis. Este día sirve para difundir esta enfermedad a la que no se le presta la debida atención, ya que los cuidados deberían empezar durante la infancia y continuar durante toda la vida.

La Osteoporosis es una enfermedad del metabolismo del hueso que se caracteriza por la disminución de la masa ósea y deterioro de la arquitectura ósea, que conducen a la fragilidad del hueso con un consecuente incremento del riesgo de fracturas.

Una de las armas que tenemos para prevenir esta enfermedad es el fortalecimiento óseo en edades tempranas, de esta manera el riesgo de padecer Osteoporosis en la adultez se reduce un 50%.

Si bien los cuidados deberían comenzar en la infancia es imprescindible reforzarlos después de los 50 años.

La mejor forma de prevención es mantener una alimentación balanceada rica en calcio (la mejor fuente de calcio son los lácteos), realizar actividad física y mantener hábitos de vida sana, estos son los mejores aliados.

Se presenta con mayor frecuencia en la mujer que en el hombre: en la Argentina se estima que la padece un hombre por cada tres mujeres.

Las mujeres se ven especialmente afectadas porque después de la menopausia la producción de estrógenos disminuye por lo cual se altera el metabolismo del calcio en el organismo, por lo tanto se recomienda aumentar la ración diaria de calcio y realizar ejercicios semanalmente.

La Osteoporosis no produce síntomas que avisen del progresivo deterioro de la estructura ósea hasta que ya es muy tarde. Es una enfermedad crónica causada por la disminución de la masa ósea y una alteración de su arquitectura, que provoca una mayor fragilidad en los huesos afectados, por lo cual tienen una mayor tendencia a sufrir fracturas. 

El Diagnóstico se realiza fácilmente a través de una densitometría ósea que mide la densidad del hueso y la evaluación clínica por parte del especialista permitirá saber si esa persona debe seguir un tratamiento o no.

La Osteoporosis se trata básicamente, mediante una dieta adecuada, con suplementos de calcio y vitamina D acompañada de actividad física, y medicamentos.