20 DE NOVIEMBRE. DÍA DE LA SOBERANÍA

La idea de  Soberanía está presente desde los albores mismos de nuestra historia como Nación. La  célebre frase  de San Martín, que dice; “Seamos Libres que lo demás no importa nada”, lo describe claramente.
La libertad para el Padre de la Patria era la realidad concreta de poder decidir nuestro futuro como Nación, desde lo político fundamentalmente para poder hacerlo, por añadidura, desde lo económico y social.
Tan fuerte fue el concepto de Soberanía Política en la génesis nacional , como no podría ser de otra manera, que prácticamente  se concentró ahí toda la fuerza y la energía para conseguirla, tanto en los campos de batalla como en los pactos, leyes y declaraciones realizados por las primeras autoridades.
En la actualidad el concepto de SOBERANÍA se vincula directamente con la posibilidad de decidir, ya como Estado políticamente independiente, la mayor cantidad de veces que sea necesario lo que más conviene a la Nación en las diferentes áreas de la realidad cotidiana. Así es que podemos nombrar, a partir de una raíz de decisión política, las ramas de la soberanía alimentaria, energética, educativa – cultural, productiva; que en la práctica se interrelacionan permanente.
Hoy  que estamos a punto de finalizar una gestión de gobierno que tuvo entre sus prioridades más sobresalientes reforzar la SOBERANÍA NACIONAL. Es importante resaltar que tanto los proyectos ARSAT I como ARSAT II, el desendeudamiento externo y el desarrollo de la industria propia, como así también un notable apoyo a las iniciativas de investigación científica ponen de manifiesto que Argentina ha sabido abrirse a un mundo multipolar para comerciar, comunicarse, intercambiar y relacionarse pero desde una base firme y sólida de autodeterminación. Esa y no otra cosa es actualmente respetar el legado incólume de aquella gesta del 20 de noviembre de 1845.