Fundador de la Gran Colombia, libertador de Colombia, Venezuela, Ecuador, contribuyó decisivamente a las independencias de Perú y Bolivia al completar la obra emprendida por San Martín, y fue una de las figuras más destacadas de la emancipación hispanoamericana. Impulsor de la unidad hispanoamericana, fue sistemáticamente traicionado y combatido por las elites dirigentes de las distintas regiones portuarias cooptadas por los intereses comerciales británicos. Sostenido únicamente en el poder del ejército Libertador, el camino a la unidad debía pasar por la guerra civil y la dictadura militar, encerrona histórica advertida por San Martín, quien optó por el repliegue y un voluntario ostracismo. Derrotado e injuriado, con la convicción de haber "arado en el mar" y amargado y desilusionado por el asesinato del joven mariscal Antonio José de Sucre, su salud, ya minada por la enfermedad, sufrió un grave deterioro, aunque tuvo tiempo de dictar su testamento y su "+ltima proclama", en la que clamó porque su muerte permitiera la unión de la Gran Colombia y la desaparición de los partidos facciosos. Había nacido en Caracas el 24 de julio de 1783.