En octubre de 1924 se reunió en Milán (Italia) el Congreso Internacional de Ahorro. Concurrieron delegados de casi todos los países y se trataron temas sobre la organización y legislación de las cajas de ahorro. El final del Congreso fue el día 31 de octubre, fecha instituida para la recordación del día Mundial del Ahorro. Uno de los buenos hábitos que ayudan al ser humano a realizarse en esta vida, a lograr muchos objetivos y a asegurarse un futuro digno y placentero es el "Ahorro".
El ahorro ayuda a una disciplina que colaboran a lograr la calidad de vida de las personas, haciéndoles alcanzar metas superiores que les proporcionarán mayor seguridad, mejor prevención, e, incluso, un final feliz y digno. La recordación del día mundial del ahorro es como un reto para frenar el galopante endeudamiento de las familias. La sociedad de consumo así como la vivienda, el petróleo y los bajos tipos de interés, reducen la capacidad ahorradora de los consumidores.
Prepararse con responsabilidad para las contingencias que puedan presentarse en la vida es ser previsor, representa un ahorro. Ahorrar alcanza, asegura y eleva la calidad de vida. Recordemos que la marca de las prendas de vestir no hace a la persona; no seamos exigentes con esto. El saber ahorrar es toda una virtud. Una actitud positiva e inteligente de la persona que lo adquiere como hábito en la vida. En primer lugar, porque ahorrar es sinónimo de prevenir, guardar algo para el porvenir.
El objetivo del ahorro es la economía, la reserva sin caer nunca en avaricia, el sentido del ahorro es amplio no es amontonar monedas y billetes en alcancías o cuentas bancarias, al contrario es utilizando en su medida justa no derrochando lo conseguido mediante el esfuerzo; el trabajo y la inteligencia, honestamente, con la ayuda de Dios, sin perjudicar a nadie; debiendo ser siempre, de origen legal, cristiano y generoso; dejando en claro la finalidad humana y cristiana de socorrer al semejante necesitado, si fuere necesario. El ahorro es un signo de respeto al semejante, a las generaciones futuras. Tomemos poco a poco el hábito del ahorro que nos ayudará a lograr una vida mejor y a ser más felices. Para el logro de nuestro objetivo, es necesario que todos los miembros del hogar colaboren.